lunes, 26 de enero de 2009

Madrid

La verdad es que a estas alturas del blog (si no mienten los datos de los escritorios de Blogger y Picasa llevo 665 fotos repartidas en 250 entradas; de las que más o menos 143 fotos y 88 entradas son de Madrid) me llevo una alegría grande cuando veo por la calle una tapa que no tenía, como esta de Borondo (a este respecto, no sé bien si es señal de que me estoy volviendo tarumba o simplemente de que siempre lo he estado, pero eso lo dejo a los especialistas). Un viejo amigo mío era nieto del dueño de tubos Borondo -ahora es cura y vive en Logroño, donde me lo encontré hace algo más de un año-: ha sido como encontrármelo en plena Prospe: le mando un fuerte abrazo y a la tapa, una foto.

1 comentario:

Stultifer dijo...

Borondo es como rondondo: gordo y redondo.