Jerusalén

El caso es que tengo unas 30 alcantarillas en espera, y sin embargo llevo doce días sin dar señales de vida. He estado muy ocupado. Y al que insinúe que cuando no estoy ocupado, no pego ni clavo y por ello tengo un blog de alcantarillas, que se lo traguen las cloacas.
En serio: a ver si recupero sensaciones alcantarilleras pronto.

Aprovecho para decir que en estos días varios amigos me han enviado varios enlaces:

Primero: a las problemáticas alcantarillas del circuito de Formula 1 del Gran Premio de Azerbaiyán, en Bakú. No encuentro un vídeo exclusivo del problema: busquen en Youtube y lo encontrarán con comentaristas y, sobre todo, podrán ver que el mismo problema en el mismo circuito lo tuvo el año pasado Sergio Pérez y lo ha tenido este año George Russell. Es curioso lo que puede hacer una alcantarilla en los bajos de uno de esos cochazos.

Segundo: Alfredo me manda un formidable reportaje de La Vanguardia sobre diversas aportaciones a la Historia alcanzadas gracias a la búsqueda en las cloacas de Barcelona. Tremendo.

Tercero: Antonio me envía el hallazgo de una alcantarilla ortográficamente mejorable que ya me enviaron hace unos días y que me limité a retuitear.

Gracias a todos.